Nadie tiene la verdad absoluta
Momentos de efervescencia se viven entre los hinchas de San Lorenzo. Por un lado están quienes sostienen que el "Patón" Bauza es intocable por habernos dado la Copa Libertadores 2014. Por el otro los que ven solo en el entrenador el responsable de los fracasos post copa.
Ni unos ni otros tienen la razón absoluta. Pero si una parte de ella. Los datos estadísticos son concluyentes: luego de finalizar la Copa pasada, San Lorenzo se ubicó octavo en el torneo local, quedó eliminado rápidamente de la Copa Argentina por Defensa y Justicia, sufrió para vencer al semi amateur Auckland City en Marruecos, cayó sin atenuantes ante el poderoso Real Madrid, perdió ambos partidos ante River por la Recopa y ayer quedó afuera de la primera fase de la copa.
El Patón lo dijo muchas veces que perdió solidez defensiva tras la partida del caudillo de la defensa Santiago Gentiletti y "25 goles con las salidas de Ignacio Piatti y Angel Correa". Los 2 refuerzos que se trajeron para reemplazar dichas pérdidas no funcionaron: Mario Yepes y Pablo Barrientos hicieron agua en el segundo semestre del 2014.
Tras una discutida, por su conveniencia o no, pretemporada en Miami, San Lorenzo incorporó 3 jugadores más: Sebastián Blanco, Franco Mussis y Matías Caruzzo. Blanco y Mussis venían de Europa pero solo habiendo disputado un par de partidos en el último año, mientras que Caruzzo venía de un año flojo entre Chile y Argentinos Juniors.
Y las experiencias no han sido buenas. San Lorenzo es un equipo que no defiende bien y que le cuesta convertir (en la copa solo marcó tres tantos en seis encuentros). Pero el principal déficit está en la gestación. Ni Blanco (con mucha actitud), ni Barrientos (con poca actitud), han podido emerger como conductores claros del equipo y Leandro Romagnoli, con sus lesiones a cuestas, ha tenido que ponerse al hombro al equipo con mucho despliegue y búsqueda, pero poca productividad.
Cuando a Bauza se lo acusa de defensivo el responde "en cancha llegué a poner a Blanco, Pipi, Pitu, Villalba, Verón, Matos, Cauteruccio, ¿dónde ven lo defensivo?" , olvidándose de su parte que en San Lorenzo las sociedades futbolísticas parecen no existir, costando además encontrar un jugador desequilibrante.
El entrenador también apostó en distintos momentos a la velocidad de Villalba y Verón para generar por los costados, pero lamentablemente, ambos jugadores vienen en una marcada tendencia en baja.
El San Lorenzo del primer semestre solo parece sustentarse en las manos de Torrico, el buen nivel de los laterales Buffarini y Mas, en algunos quites de Mercier, en algún despliegue del Pipi y en algún cabezazo de Matos, muy poco para un equipo que quiere ser protagonista.
Bauza dijo: "vamos a pelear el torneo largo y tenemos la Copa Argentina", dos objetivos que nos permitirían volver a la Libertadores 2016, pero que no serán sencillos, tanto por el bajo nivel del conjunto de Boedo como por el alto nivel que parece seguirán teniendo otros equipos grandes.
Hay que parar la pelota y repensar el año. Tenemos diez días para recibir a Vélez. Técnico, jugadores, dirigentes e hinchas, calma. El apuro, la bronca y la ansiedad no son buenas consejeras.